Lourdes Brito afea a su compañera de partido (ICAR) las «ansias de poder» al arrebatarle con un decreto sus competencias municipales aprovechando una baja médica
El pacto entre el Partido Popular y los indenpendientes de ICAR en el municipio de Cartaya que da estabilidad al gobierno local está a punto de saltar por los aires y todo ello por una lucha interna dentro de ICAR en el que se le han arrebatado las competencias a uno de los tres ediles de la formación mediante un decreto, aprovechando la baja médica de la edil Lourdes Brito, responsable de Obras, Servicios, Parques y Jardines que ha pasado por un proceso de baja debido a un cáncer de mama.
Según se refleja en las imágenes del pleno de Cartaya, a las que ha tenido este periódico, es la propia edil perjudicada la que toma la palabra durante el pleno para afearle a su compañera de partido, portavoz del grupo ICAR y primera teniente alcalde, Eva Moya el proceso llevado a cabo para quitarle sus competencias municipales que, según ella, «solo responde a sus ansias de poder».
«Es un decreto premeditado y trabajado a escondidas que no se me ha consultado, Eva Moya ha aprovechado que estoy de baja por enfermedad para quitarme las competencias y con mentiras», asegura la edil.
Según relata Lourdes Brito, «Eva Moya tiene delegada mis competencias desde octubre cuando me doy de baja, por loq que no había necesidad de hacer un decreto, y esto responde únicamente a sus «ansias de poder». Me quita usted todas las competencias e intenta justificarse que es por mi enfermedad y es por mi bien, si tanto le preocupa usted ¿porque no me pregunta?», ha espetado durante su intervención.
Brito asegura que Moya dice preocuparse de su enfermedad ahora «cuando he pasado un tratamiento de quimioterapia, otro de radioterapia y una cirugía, y usted se preocupa ahora, quitarme las competencias es la forma de preocuparse por mi, pues no se preocupe tanto, es vergonzoso».
Para Brito estas son «las formas más sucias que se han dado en este ayuntamiento y me amenaza incluso con expulsarme del grupo y le digo hágalo, pero no lo haga a escondidas».
De este modo Brito a animado a Moya a «culminar su maquivélico plan, no le da a usted verguenza humillar a las personas de esta manera, no se donde tiene usted los límites pero para mi, usted ha traspasado todos los límites de la moralidad, me podéis quitar todo, pero no me podeís quitar la voz, voy a seguir trabajando por mi pueblo desde este sillón o desde la oposión, pero no voy a permitir que engañe usted al pueblo de Cartaya» ha asegurado.
La posición de la todavía edil de ICAR, en caso de abandonar o ser expulsada de la disciplina del partido, dejaría en minoría al actual equipo de gobierno formado por ocho ediles del PP y tres de ICAR, frente a los siete del PSOE, dos de Vox y uno de Izquierda Unida (Con Andalucía), por lo que la bronca interna en los independientes amenaza la estabilidad del equipo de Gobierno que se vería obligado a gobernar en minoría o pactar con Vox.